Los Retos y Los Desafíos en La Practica

Los retos y desafíos por supuesto existen en el trabajo y también en la práctica que estoy haciendo en el hospital de la santa caridad. A veces los retos son difíciles y frustrantes pero a través de solucionarlos, se aprende mucho. Un reto que he tenido en mi práctica ha sido como aportarme con los ancianos que tienen alzhéimer y demencia. Por ejemplo, durante un día de mi trabajo, un residente de Alzheimer estaba gritando a los cuidadores, diciendo malas palabras a ellos y a mí también porque él quería andar aunque no es capaz porque no tiene fuerza. Al principio cuando veía esta cosa pasando, me sentía muy mal por él y me afectaban sus palabras feas. Aunque, ahora he logrado unas técnicas útiles para controlar la situación profesionalmente. Por ejemplo, ahora no tomo las palabras feas sinceramente porque yo sé que ellos no tienen mucho control por parte de su enfermedad. También he aprendido de hablar con una voz muy suave para calmarles y después les distraigo con un caramelo o algo de tomar, como agua fresquita. No hay que gritar a ellos si nos están gritando, hay que tranquilar la situación con paciencia y respeto.

            El otro desafío ha sido la comunicación verbal. Muchos de los ancianos tienen acentos muy fuertes, y se empeoran si han perdido sus dientes. A veces ellos me preguntan cosas sobre las instrucciones de sus medicamentos o tal vez me piden un favor. Desafortunadamente, no les entiendo perfectamente todo el tiempo y se ponen fastidiados. Profesionalmente, he aprendido que es mejor si tampoco me fastidia que no esté entendiendo. Lo que tengo que hacer es ser muy  paciente y amable y preguntarles si pueden repetir. Si todavía no les entiendo, tranquilamente yo busco un cuidador que me puede ayudar.